Me duele la boca cuando hablo de ti
me sangran las encías cuando.
me dan nauseas y se me retuercen las tripas.
me transformé en partícula de polvo, para ti
me hice pedazos el cuerpo y te lo bebiste, mezclándolo en té.
me, me, me… y así hasta la saciedad.
Electricidad estática la tuya, en las manos
rocambolesca presencia la tuya, pienso y luego me río.
preciosa mirada en tus ojos, de odio.
Tu, tu, tu… y así hasta morirme-te.
serpentinas caídas de las nubes del cielo gris, serpentinas de colores
cayendo en el tejado roto. Llenando las bombillas de luz, el equilibrista aún no está cansado de andar de puntillas por el fino filamento, no le importa que esté destrozado
figuras translucidas corretean por la habitación gritando que pare de andar, corazones de papiroflexia hechos con algún pedazo de periódico viejo caen al suelo.
Vasos de cristales y diamantes con el que poder arañarlos.
Y cuando no queda mas que todo eso, todo es nada.
.eme.buenasnoches.
martes, 1 de septiembre de 2009
Suscribirse a:
Entradas (Atom)